Saltar al contenido

Atrapaluces de naturaleza congelada

Atrapaluces

Como sabéis, nos encantan las actividades con materiales de la naturaleza, y el frío del invierno no tiene por qué ser un problema, es más, ¡es una oportunidad de experimentar cosas nuevas!

Aprovecharemos un paseo al aire libre con los peques para recolectar todo tipo de materiales, y ya veréis qué bonito uso le daremos… ¡haremos un atrapaluces de hielo! Como es una actividad para hacer en invierno, cuando el frío conservará por más tiempo nuestro atrapaluces, también podemos aprovecharlo para hacer una actividad de Navidad. Podemos recoger hojas de pino, pequeñas piñas, ramitas de algún arbusto con bayas rojas, y agregar otros materiales, para hacer un atrapaluces de Navidad.

Materiales necesarios

  • Un recipiente de plástico que podamos poner en el congelador
  • Materiales recolectados en la naturaleza
  • Adornos de Navidad (opcional)
  • Purpurina o colorante alimenticio (opcional)
  • Agua
  • Una cuerda
  • Tijeras

Paso a paso

  1. Como hemos dicho, esta actividad comienza dando un paseo en familia, en el que recolectaremos material presente en la naturaleza: hojas, ramitas, bayas, flores, piñas, etc.
  2. Cuando llegamos a casa, si queremos hacer un atrapaluces de Navidad, buscamos algunos adornos pequeños, purpurina, colorante o lo que queramos incluir en la actividad.
  3. Hacemos dos agujeros sobre uno de los lados del recipiente, para pasar la cuerda.  
  4. Pasamos un trozo de cuerda gruesa, con los extremos dentro del recipiente, y el resto colgando fuera. Será la cuerda que usaremos para colgar el atrapaluces. 
  5. Cogemos nuestro recipiente, y colocamos dentro todos nuestros elementos, teniendo cuidado de distribuirlos bien. Hay que tratar de que el atrapaluces no tenga un espesor mayor de 5 cm, así que los elementos no deberían sobrepasar esta altura.            
  6. Llenamos una jarra con agua, si lo deseamos le ponemos purpurina o unas gotas de colorante, mezclamos, y con cuidado para que no se nos mueva nada, vertemos en el recipiente. 
  7. Llevamos al congelador de un día para otro
  8. Retiramos del congelador, desmoldamos (puede hacer falta mojar el recipiente con agua tibia) y colgamos nuestro atrapaluces de hielo al aire libre, de preferencia en algún lugar donde no le de el sol para que nos dure más.

Quién puede hacer esta actividad

  • Niños de edad preescolar en adelante: dependiendo de la edad necesitarán más o menos ayuda de un adulto.

Para qué sirve esta actividad

Se trata de una actividad sensorial que además nos permite aprender algunas nociones nuevas. La recolección de elementos de la naturaleza estimula la curiosidad, la capacidad de observación y todos los sentidos en contacto con la naturaleza. Aprenderemos sobre el ciclo del agua y sus estados sólido y líquido, estimulando la curiosidad de los peques con preguntas que les lleven a sacar sus propias conclusiones: ¿qué ha pasado para que el agua se convierta en hielo? ¿Qué tenemos que hacer para que vuelva a ser líquida?

Es, sobre todo para los niños más pequeños, una preciosa actividad sensorial que estimula el sentido de la vista con colores y transparencias, y el del tacto con las diferentes texturas de los materiales, la sensación de frío, de húmedo, etc.

Consejos prácticos

  • Como en cualquier otra actividad realizada con niños pequeños, también en este caso deben estar bajo constante supervisión de un adulto.
  • Podéis adaptar la actividad a otras temáticas.
  • También podéis hacerla en verano, será una experiencia diferente ver cómo el hielo se derrite rápidamente.