Uno de los primeros juegos al aire libre que aprenden los niños es el juego del escondite.
A medida que los niños crecen y van aprendiendo con otros niños, el juego del escondite se perfecciona. La manta se sustituye por una zanja detrás de un muro o las raíces semi levantadas de un árbol.
Prepara esta actividad con los niños para cualquier ocasión y época del año.
Cómo jugar al escondite
- Para jugar al escondite uno de los participantes deberá ser el que le toque buscar a los demás. Este pequeño pondrá los brazos doblados sobre una pared, recostará allí su cabeza y comenzará a contar.
- Inmediatamente los demás participantes correrán a ocultar hasta donde les de la cuenta o en donde crean que nadie los podrá encontrar.
- Una vez que termine el conteo, el niño que le toca buscar comenzará a recorrer el lugar en donde el juego se practica. De forma gradual irá descubriendo a cada uno de sus amigos hasta que le toque el último.
- Si dado un tiempo no logra dar con la guarida de éste, a él otra vez le tocará contar y buscar a los demás; pero, si lo halla, ambos deberán echar una carrera a toda velocidad hacia la base.
- El último que llegue será el perdedor y a quien le tocará contar y buscar a los otros.
En cada sitio el juego del escondite se desarrolla de diversa forma. Así que antes de empezar el juego será importante explicar bien las reglas del juego.
Reglas del Juego:
Las reglas del juego del escondite, para que no haya desavenencias entre todos los participantes, deben ser muy estrictas:
El niño que le toca buscar, mientras cuenta, no puede, por ningún motivo, espiar a los demás jugadores
Si el niño que le toca buscar te descubre en tu guarida no puedes hacerte el desentendido y escurrirte hacia otro escondite. Tienes que salir
El niño que delate el escondite de otro niño no puede jugar más
Está prohibido hacerle zancadillas a cualquier niño que vaya corriendo hacia la base
