A muchos niños les gustan las máscaras, en cambio, a otros los asustan. Para que tu hijo se distraiga y destaque en este tipo de manualidades, o comience a perderle el miedo a estos graciosos disfraces si es su caso, hoy quiero ofrecerte algunas ideas para confeccionar máscaras con bolsas de papel muy sencillas.
Para confeccionar la máscaras cerciórate de que la bolsa de papel le quede holgada a tu hijo con la idea de que una vez puesta lo haga sentir cómodo.
Colócasela, marca los agujeros por donde están sus ojos. Puedes hacer lo mismo con la nariz y la abertura de la boca dependiendo del modelo. Luego retírala y utiliza las tijeras para recortar todos los hoyos.
Dile al niño que elija los materiales para adornar el papel. Lo importante es cubrirlo lo más posible y hacerlo muy colorido tal y como son las máscaras de los carnavales. En ella pueden trabajarar de forma libre, ayudándoles a la hora de recortar o utilizar el pegamento de barra.
Puedes utilizar retales de cartulina que te sobren de otras manualidades o papeles de colores para que tu hijo adorne su máscara. Para ello marcar y recorta diversas figuras que después ellos, pegarán en la bolsa con ayuda del pegamento de barra.
Con los rotuladores de colores o ceras los niños pueden hacer diferentes dibujos o solo rallas y garabatos por doquier. En eso tu hijo seguro que es un experto 🙂
En este tutorial paso a paso os vamos a mostrar cómo decorar una máscara muy sencilla para niños a partir de dos años.
Materiales necesarios
- Bolsas de papel grandes
- Pintura
- Pincel
- Ceras de colores
- Tijeras
- Para niños más grandes podéis añadir más cosas por ejemplo: Retales de cartulina, lana, pompones, pegamento de barra, purpurina..)
Paso a paso
- Si la bolsa que tenemos tiene dibujos o inscripciones, la pintaremos con pintura. Los niños a partir de 2 años pueden ayudarnos en la tarea. Dejamos secar
- Ahora los niños deberán dibujar los ojos y la boca del fantasma. Es importante que les marquemos el sitio donde deben pintar los ojos, porque luego deberán poder ver a través de los agujeros. Los niños a partir de dos años pueden ayudarnos a pintar los ojos y la boca, si son más grandecitos podemos complicarlo un poquito más y adornar nuestra máscara de papel pegándole trocitos de cartulinas, lentejuelas, lanas o pompones.
- Ahora mamá recorta los círculitos dentro de los ojos para que podamos ver al ponernos la máscara… listo, ¡a jugar!
Quién puede hacer esta actividad
- Bebés de 1 y 2 años: lo más pequeñitos no podrán participar en la realización de la máscara, pero si que podrán jugar con ella y divertirse. ¿El juego más clásico para hacer? ¡Cucú!
- Niños de preescolar: Los niños de más de 3 años pueden participar activamente en la realización de la máscara. Pueden pintar la bolsa, dibujar los ojos, y los más mayores, que ya saben usar las tijeras, pueden cortar los ojitos.
Para qué sirve esta actividad
Con esta actividad desarrollamos la motricidad fina.
Podemos realizar diferentes máscaras (varios fantasmas u otros personajes) y hacer un juego de rol: en los juegos de rol cada participante debe representar un papel, es decir actuar como un determinado personaje. Así iremos contando una historia en donde los peques deberán ponerse en el lugar de otro, desarrolando la empatía, la imaginación y la interacción en grupo, entre otras cosas.
Con los más pequeños, podéis tratar el concepto de permanencia, mostrándoles que cuando algo desaparece (nos cubrimos con la máscara) no deja de existir, ayudándoles a superar el ansia de separación
Consejos prácticos
- Con los peques más mayores podéis proponer que cada uno diseñe su propio personaje, no tienen porqué ser todos iguales.
- Con esta actividad seguro que nos ensuciaremos un poquito, proteged la mesa de trabajo y ponedles un babero con mangas a los peques
Reportajes: Vero – Textos: Rosa y Andria
