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Pavo con huellas y plumas

Pavo con pintura de dedos

Las pinturas con huellas de manos o pies son un modo estupendo de iniciar a pintar a los niños más pequeños. Además de ser una tarea que aporta múltiples beneficios es una actividad sensorial que fomenta la creatividad, ya que usando la imaginación podemos convertir las huellas en prácticamente cualquier figura.

En este post voy a enseñaros cómo hacer un divertido pavo con huellas y plumas, una actividad ideal para celebrar el Día de Acción de Gracias o simplemente para pasar un rato divertido con nuestros hijos.

 

Manualidades con huellas

Materiales necesarios

Paso a paso

Pavo con huella de la mano

Lo primero que tenemos que hacer es dejar la huella de la manita o del pie del niño sobre la hoja de papel. Para ello, ponemos un poco de pintura lavable marrón en un plato y mojamos la punta de la esponja en la pintura. Con la esponja pintamos la mano o el piececito e inmediatamente lo apoyamos sobre la hoja, tratando de no moverlo una vez que lo apoyamos. Levantamos… ¡Y ya tenemos nuestra huella lista! Dejamos secar antes del siguiente paso, a la vez que aprovechamos para lavarles la manita o el pié.

Cuando la pintura esté seca, podemos comenzar a transformar la huella en un pavo. Con el rotulador negro dibujamos el ojo y con un rotulador amarillo o naranja dibujamos el pico, las patas y la papada.

Manualidades para Acción de Gracias

Ahora con la cola y el pincel iremos pegando las diferentes plumas en la parte superior de nuestra huella inicial.

¡Nuestro pavo está listo!

Pintar con la huella de la mano

Quién puede hacer esta actividad

  • Los niños de preescolar necesitarán ayuda, los más grandes podrán hacer el pavo solitos, siempre bajo la supervisión de un adulto para facilitarles que luego estén más contentos con el resultado. Aunque en el paso a paso os hemos explicado el proceso de cómo realizar el pavo, es mejor dejar que los peques usen su imaginación. Podemos darles la consigna: “ahora tenemos que convertir esta huella en un pavo” y luego dejar que sean ellos mismos por sí solitos quienes encuentren el modo: ¿Cuál sería la cabeza?, ¿dónde pegamos las plumas?, ¿qué características particulares tiene un pavo?.

Para qué sirve esta actividad

Cómo hacer un pavo con la huella de la mano

Con este pavo de huellas y plumas los niños estimularán el sentido del tacto y de la vista, desarrollarán la motricidad fina y fomentarán su creatividad y la capacidad de observación.

El sentido del tacto lo estimularemos con el contacto con las diferentes texturas de los materiales: la pintura blanda y resbaladiza y las plumas suaves. La motricidad fina la trabajamos al tener que coger los rotuladores, el pincel, pegar las plumas en su sitio, etc. La creatividad y la capacidad de observación son necesarias para poder reconocer las formas escondidas en las huellas; recordar cómo es un pavo (u otro animal que escojamos) y ver de qué manera podemos convertir la huella en el animal.

 

Consejos prácticos

  • Los niños deben estar siempre supervisados por un adulto quien les irá dando las distintas pautas de cada fase y alabando sus buenísimas ideas.
  • También se pueden usar témperas pero las pinturas lavables se quitan fácilmente de la piel y la ropa con agua y jabón, además no son tóxicas.
  • Podemos usar la huella del pie en lugar de la de mano. En este caso los deditos serán la parte inferior del pavo y sobre el tacón pegaremos las plumas; dibujando los ojos y el pico en el tacón.
  • Con la misma técnica podremos hacer otros animales e incluso distintos objetos variados: un coche, un tractor, una casa, etc.

¡Todo es posible cuando concedemos el poder a la imaginación!.