Hay actividades cotidianas que podemos hacer con los peques, y que casi sin darnos cuenta, contribuyen a desarrollar la motricidad gruesa en los primeros años, cuando los niños están aprendiendo todo lo que tiene que ver con el movimiento, el equilibrio, la fuerza y la coordinación.
La actividad que realizaremos hoy es muy simple, y a la vez muy útil para estimular la fuerza, la agilidad y la coordinación: vamos a recoger pompones con un recogedor de mano. Se trata de una actividad indicada para niños a partir de 2 años.
Materiales necesarios
- Pompones
- Recogedor de mano
Cómo se hace la actividad
Vamos a distribuir los pompones sobre la mesa (también puede ser en el suelo) y pediremos a los niños que los recojan con el recogedor de mano, y los pongan luego en una caja o contenedor.
Quién puede hacer esta actividad
- Niños a partir de 2 años: con menor o mayor dificultad, esta actividad es apta para desarrollar la motricidad gruesa hasta los 5 años aproximadamente.
Para qué sirve esta actividad
La motricidad gruesa es la que involucra la coordinación de los movimientos y el equilibrio, además de la fuerza, agilidad y velocidad que hace falta para cada uno de ellos. Involucra varios grupos de músculos: caminar, saltar, gatear, etc.
En nuestro caso, la actividad requiere habilidades diferentes:
- Los brazos y manos realizan movimientos diferentes (con una sostener la pala, con la otra barrer los pompones), pero coordinados.
- También hay que medir la fuerza para que los pompones terminen en la pala y no vuelen por el aire.
- Si lo hacemos en el suelo, habrá que agacharse y moverse en cuclillas.
Consejos prácticos
- Si no tenéis pompones, podéis hacer bolas de papel.
- Con los peques más mayores, podéis elevar el nivel de dificultad pidiéndoles que recogan solo los pompones de un determinado color, sin usar las manos para ayudarse.