Como ningún otro mes del año, el verano, ofrece infinitas posibilidades de recreo.
Durante la etapa estival puedes llevar a los niños a las playas, los parques de diversiones, los zoológicos, museos, ferias…, pero también están aquellos divertidos juegos para hacer en casa que se fabrican entre padres e hijos.
Un tobogán resbaladizo con espuma de afeitar es un buen pasatiempo para compartir con los niños.
Confección del tobogán
En la visita a los parques acuáticos, sobre todo, podemos encontrar distintos tipos de toboganes: más o menos inclinados, cerrados o abiertos, formados por piezas rectas, curvas o en espiral…; no obstante, existe un tipo de tobogán muy fácil de hacer que puede construirse en casa y no requiere de una piscina donde finalizar el recorrido. Lo mejor es que tiene un bajo costo y, siempre que la rampa no esté muy inclinada, no es peligroso para los infantes.
Para construir este peculiar tobogán necesitas tener:
La rampa: una inclinación en el relieve, en el suelo de tu jardín, en el de un parque natural, o cualquier otro sitio. Se recomienda un lugar al aire libre
Espuma de afeitar: cualquier tipo de espuma de afeitar. Lo fundamental es que sea abundante
Cuerpo del tobogán: una estructura de plástico lo más larga posible y con el ancho suficiente como para que los niños puedan desplazarse sin salirse por los lados
Agua: una garrafa de agua será suficiente
Ropa adecuada: la menor cantidad posible. Se recomiendan las trusas; pues, mientras menos fricción haya más fácil será el deslizamiento.
El juego de resbalar por la rampa
Invita a tu hijo a situar la plancha de plástico donde más le guste, recuerda que debe ser un lugar inclinado. A continuación lanza un poco de agua hasta mojar la cara superior del plástico. Con toda la espuma de afeitar que puedan y, siempre con las manos, embadurnen el tobogán. Cuando el aparato esté montado y listo para usarse haz que otro adulto se coloque en la parte superior de la rampa para sujetar el plástico y evitar que este se deslice pendiente abajo. Si tu hijo es un poco pequeño te puedes colocar al otro extremo para alcanzarlo cuando llegue a él. Para hacer más divertido el juego puedes untar un poco de espuma de afeitar en sus piernas, su trusa y su espalda.
A medida que se sumen más pequeños al juego de “resbalar por la rampa” se necesitará más cantidad de agua y espuma de afeitar.
¡Ojo!, la tirada debe ser de uno en uno y siempre formando una cola organizada. El respeto y la disciplina también son parte del esparcimiento.
Espero que os haya gustado esta actividad! También podéis ver aquí la versión más sencilla del juego del plástico resbaladizo .. Una actividad ideal para bebés y para niños de preescolar
Redactado por Agetna
