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A menudo son muchas horas en coche en las que ponemos a prueba la paciencia de los niños. ¿Qué mejor que aprovechar la situación en proponerles actividades para hacer por el camino?. ¡En cualquier lugar puede venir la inspiración!.  Nos decantamos por juegos tranquilos, que proporcionen sosiego en el viaje, a través de la observación.

La observación de los colores del cielo, si es de día, es una de las mejores opciones y más a mano en este caso. Fomentamos que los niños se fijen en la naturaleza, que esta les inspire i despierte su creatividad,  a la par que trabajamos su apertura de la perspectiva de visión que normalmente tienen puesta en un punto fijo… Les entrenamos a que tienen que abrir el grado angular de los ojos de vez en cuando para observar las cosas desde distinta perspectiva.

Sacaremos algunas fotos con el móvil o la cámara a los paisajes que vamos viendo por el camino… No importa que algunas salgan movidas; el arte incluso a menudo se encuentra ahí,  en algunas fotos hechas rápidamente incluso a contraluz…  Y hasta cuando salen movidas  ¡Crean efectos increíbles!.

En esta ocasión era el atardecer regresando de Cantabria cuando observamos una mágica puesta de sol…  Pusimos una música tranquila y hablamos de los colores de la naturaleza nos ofrece…

 

Materiales:

Móvil  o cámara de fotos. (Comprueba que tienes espacio en la tarjeta y la batería cargada).

Música clásica o tranquila. (Elígela de antemano si tienes ocasión).

Pasos a seguir:

. Se trata de la observación continua del paisaje a la espera de algo precioso que queramos plasmar para la eternidad…

. Poner música clásica o tranquila unos 15 minutos antes de iniciar la actividad y explicarles con calma en qué va a consistir.

. Les decimos que vamos a atrapar los hermosos y cambiantes colores que el cielo nos ofrece.  Para ello no podemos estar chillando pues sino no podemos atrapar los momentos “mágicos”.

. Si hay varios niños vamos pasando la cámara de uno a otro permitiéndole hacer hasta, por ejemplo 3 ó 5 fotos, con la condición de que tiene que esperar ,antes de echar cada una de ellas, un momento observando, respirando despacito y no hacer click hasta que le mueva la inspiración de haber visto algo precioso.

. Si el viaje es largo, tras una ronda de fotos del cielo podéis pasar a fotos del paisaje. También del mar, si lo veis durante el camino.

Ya verás como conseguís fotos preciosas que culminarán el bonito reportaje que seguro traéis de vuestras vacaciones.