Un experimento casero muy vistoso y divertido con el que trabajamos el conocimiento de las efervescencias y su efecto sobre las ligeras semillas de maíz. Si plantasteis maíz en primavera ahora, en la cosecha otoñal, podéis usar algunas de las semillas para esta actividad y si no, seguro que en tu cocina no faltan los simpáticos granos de maíz.
Materiales necesarios:
- Jarra o bote de cristal de un litro aproximadamente de capacidad.
- Semillas de maíz
- Bicarbonato de sodio
- Agua
- Vinagre
- Copita
- Cuchara grande o removedor…
Pasos a seguir:
- Llena la jarra con dos tazas de agua.
- Agrega dos cucharadas soperas de bicarbonato de sodio y removedlo bien hasta que quede bien disuelto.
- Dale unos pocos granos de maíz para que los eche en la jarra.
- Pregúntale a tu peque qué cree que ocurrirá si echa algo de vinagre en la jarra de agua con bicarbonato y los granos de maíz… ¡Pasad a la acción!.
- Llena la copita con vinagre y dásela para que la vierta en la jarra. Verás cómo le regocija ver bailar alegremente el maíz que subirá con la efervescencia y volverá a bajar cuando esta termine.
- Repetid echando vinagre todas las veces que os apetezca y disfrutad del baile del maíz.
Quién puede hacer esta actividad y alternativas
- Bebés a partir de 18 meses: Puedes hacer este experimento ante tu bebé i seguro que captas su atención.
- Niños a partir de 3 años: Esta es una actividad ideal para los peques de preescolar, quienes siempre se sienten muy motivados con todas las novedades que les ofrezcamos para incrementar su aprendizaje.
Alternativas para niños más mayores
Los niños mayores de seis años también pueden disfrutar de la recreación visual que nos ofrece este simpático baile de palomitas.
Para qué sirve esta actividad
Trabajamos el conocimiento de las efervescencias y su efecto sobre las ligeras semillas. Fomentamos la diversión, la curiosidad, la capacidad de sorpresa y la estimulación visual.
Consejos prácticos
- Echa poco a poco el bicarbonato en el bote una vez tenga el maíz dentro, ya que no pretendemos aquí una efervescencia rápida y potente sino un ligero baile, para lo cual, iremos echando el bicarbonato paulatínamente para que el baile de granos sea más ligero pero dure más tiempo.
- Deja que sea tu peque quien vaya echando las cucharadas de bicarbonato y así le divertirá más que el maiz baile al son que él plantea.
