Hoy proponemos un juego que nos irá genial en los días que los niños han derrochado movimiento y les vendría genial un ratillo de calma para asentar las energías motoras.
Con el juego de la calma ayudaremos los niños a desarrollar la autodisciplina y la conciencia de los sonidos circundantes. Puede hacerse en cualquier entorno y con niños de todas las edades.
Aprenderán a caminar lentamente, cuidando no golpear nada, sin oír ni siquiera sus pasos y apreciando la voz que le llama con un fino susurro. Los niños sienten una alegría natural tras este juego, fruto de la relajación conseguida.
Consiste en permanecer en silencio y quietos (para no emitir ningún ruido) durante un tiempo determinado, según las consignas acordadas. El juego tiene muchas variantes y seguro que espontáneamente os surgen muchas más.
Necesitas
- Un letrero con la palabra “Silencio”. (opcional)
- Una imagen de un lugar tranquilo.
- Un reloj de arena (opcional).
- Un timbre o campanita .
- Una vela puede ser de led.
Pasos a seguir
Sienta a los niños formando un círculo en el suelo o en pequeñas sillas indicándoles que se centren en “escuchar” el sonido del silencio.
Inicia el juego sonando un timbre o campanilla, susurrando la palabra “Silencio”, apagando las luces y encendiendo una vela.
Aléjate sigilosamente unos metros o a la habitación continua. Mantened todos unos minutos de silencio o quietud. A veces hacedlo con los ojos cerrados y otras abiertos.
Con la práctica, el juego puede hacerse aumentando el tiempo de silencio y quietud.
Susurra el nombre de un niño, quien deberá levantarse sin hacer ningún ruido y sentarse, iniciando otro círculo a tu lado. Ve susurrando uno a uno el nombre de todos, uno tras otro y paulatinamente habréis formado un círculo silencioso.
Puede hacerse el juego también con un solo niño.
Puedes poner un reloj de arena que indique la permanencia en absoluto silencio antes y después de empezar a llamarles.
Rizando el rizo se le da a cada niño una ristra de cascabeles o similar para que se ejerciten en caminar sin que suenen.
Podéis comentar al final lo que cada cual haya escuchado en el silencio. ¡Seguro que encontráis muchas sorpresas!.
PARA QUE SIRVE ESTE JUEGO
El juego del silencio o de la calma favorece el desarrollo de disciplina interna, el autocontrol, la paciencia, la tolerancia, la relajación y el refinamiento del oído. Proporciona alegría y autosuficiencia.
SUGERENCIA
Podéis tener en casa vuestro espacio especial “silencio” para conseguir estupendos momentos de calma. Puede contener una lámpara de sal y una planta de Aloe Vera o lo que os motive. Al final se convierte en un refugio seguro para todos.
