Para los papis creativos como nosotros, cualquier actividad es la excusa perfecta para aprender algo nuevo ¿verdad? Por eso nos gusta hacer actividades temáticas que sigan las estaciones del año, en este caso actividades de invierno. Hoy haremos un juego sensorial de invierno con hielo y algunos juguetes… ¡los juguetes patinarán sobre hielo!
Con esta actividad sensorial los bebés y niños a partir de 1 año pondrán en juego los sentidos, a la vez que, al menos los más mayores, aprendemos algo sobre el invierno y los animales que viven en zonas muy frías.
Materiales necesarios
- Juguetes de plástico, animales polares, o legos y otros juguetes pequeños
- Recipientes de plástico pequeños
- Una bandeja grande, puede ser una bandeja de horno o una bandeja de plástico. También se puede pegar un plástico al suelo
- Opcional: colorante alimentario azul
Paso a paso
- El primer paso es preparar la actividad, el día anterior porque debemos darle tiempo al hielo de hacerse. Cogemos nuestros recipientes y los llenamos de agua, unos dos dedos serán más que suficientes. La cantidad de agua depende del juguete, tenéis que ponerlo de pie al centro del recipiente y no tiene que flotar. Podemos teñir el agua con unas gotas de colorante.
- Una vez que tenemos los recipientes con agua, los llevamos al congelador. Tenemos que hacer previamente espacio, porque los recipientes deben apoyar derechos. Cuando los tenemos en el congelador, ponemos los juguetes en el centro de cada uno, de pie. Dejamos congelar toda la noche.
- Al día siguiente es el momento de realizar la actividad en sí misma. Vamos a desmoldar los bloques de hielo, preparar una bandeja grande con los bloques y ponerlo en el suelo o sobre la mesa para que los peques jueguen. Nosotros hemos creado un espacio más grande pegando un plástico al suelo.
- Los niños harán patinar los juguetes y podrán inventarse historias y juegos, os damos más información más adelante.
Quién puede hacer esta actividad
- Bebés a partir de 1 año: para ellos será un juego puramente sensorial: explorarán la sensación del frío del hielo, de la humedad, harán resbalar los bloques, tal vez intentarán quitar los juguetes del hielo. También estimularán la vista con las transparencias del hielo.
- Niños de preescolar: a partir de esta edad podrán jugar usando la «pista de patinaje» escenario, desarrollando historias con los animales o juguetes. Podemos incluir otros juguetes como por ejemplo barcos, podemos leer un cuento relacionado, hablarles de los polos, cómo allí siempre hace frío, etc.
Para qué sirve esta actividad
Para los bebés se trata de una actividad que estimula los sentidos: la vista, el tacto, etc. También desarrolla la motricidad, tanto la gruesa – que involucra la coordinación de los movimientos y el equilibrio, además de la fuerza, agilidad y velocidad que hace falta para cada uno de ellos- como la fina, que hace referencia a movimientos voluntarios mucho más precisos, que implican pequeños grupos de músculos.
Para los niños de preescolar, esta actividad estimula la curiosidad y nos permite introducir nuevas nociones como las estaciones, la diferencia entre frío y calor, los animales que viven en climas fríos, etc. Cuando se juega con otros niños y cada uno tiene un rol en la representación de la «historia» que se va inventando con el juego, también se estimulan las habilidades sociales.
Consejos prácticos
- Los niños deben estar siempre bajo la supervisión de un adulto
- Podéis complementar la actividad leyendo un cuento relacionado, os sugerimos estos: Me gustaría tener un oso polar – ¿Dónde está mi huevo?