Cuando la familia se agranda y recibimos la hermosa noticia de la llegada de un bebé, a medida que se acerca el momento del nacimiento comenzamos a pensar a las cosas prácticas: ropita, pañales, cuna, cochecito de bebé y también la trona, algo fundamental en los primeros 2 o 3 años de vida. La trona es la silla especial que usaremos cuando comenzaremos con la alimentación complementaria, alrededor de los 6 meses, pero os aseguro que puede seros útil ya mucho tiempo antes: todo depende del modelo que escojáis..
Ya… ¿entonces qué tenemos que tener en cuenta para escoger una trona para bebé? Os vamos a dar unos pocos consejos para que tengáis en cuenta a la hora de elegir, pensando en cuáles son vuestras necesidades específicas:
Tronas: de dónde comienzo
Para no perderte en el mar de productos disponibles, y al mismo tiempo tener una idea amplia de todas las tipologías de tronas que existen, te aconsejamos visitar una tienda online especializada antes de decidirte a comprar. Por ejemplo en Sillasdepaseo.es encuentras las tronas divididas por categorías (evolutivas, de madera, convertibles, etc) y podrás darte una idea rápida de lo que quieres.
Ahora veamos entonces a grandes rasgos qué tipos de tronas existen:
Tronas evolutivas y/0 convertibles
Son muy prácticas porque como su nombre lo indica, se adaptan al crecimiento del peque. Las hay incluso que se pueden usar desde 0 meses, ya que se reclinan y se usan como hamaca también. Yo por ejemplo con mis hijos he usado una así y me resultó muy práctica. Tienen adaptadores para regular el tamaño del asiento, se regulan también en altura, se pueden usar con la bandeja cuando son más pequeños, o acercar a la mesa cuando son más mayores.
Incluso hay tronas evolutivas que una vez que no las utilizas más, se convierten en una mesita con silla para que el peque use como escritorio. ¿La desventaja? Suelen ser algo engorrosas, considéralo si tienes poco espacio en casa.
Tronas de mesa y tronas portátiles
Las tronas de mesa son las ideales si tienes poco espacio: tienen un asiento flexible con una estructura que se fija directamente a la mesa. Cuando no las usas puedes ponerlas plegadas en cualquier lado, ocupan poquísimo espacio. La gran desventaja de este tipo de tronas es que son poco adaptables: no se regulan de ninguna manera, y el peque tiene que poder estar sentado solito porque brindan poco sostén.
Las tronas portátiles son prácticas para las familias que coméis seguido fuera de casa: se colocan sobre una silla normal, y con respecto a las tronas de mesa brindan un sostén mayor. Además hay modelos que tienen su propia bandeja.
Qué tienes que tener en cuenta para comprar una trona
- Seguridad: comprueba que la trona sea estable, que el cinturón sostenga bien al bebé sobre todo los primeros meses que aún no se mantienen bien seguros sentados, etc
- Tamaño: mira bien las medidas de la trona abierta y plegada e imagina dónde la pondrías habitualmente en casa: ¿tienes espacio? ¿terminaría siendo incómoda?
- Uso: piensa en el uso que le darás. ¿Tu peque estará sentado unos pocos minutos mientras come o también podría dormir la siesta en la trona? ¿O usarla para estar sentado jugando mientras tú haces algo en casa?
- Limpieza: la trona se ensuciará, y mucho. Escoge una que sea fácil de limpiar, cuyos revestimientos se puedan quitar fácilmente, también las correas.
¿Qué te parece esta información sobre las tronas para bebés? ¿Te resultó útil?
