
Las bolsas sensoriales son una actividad perfecta para estimular los sentidos de los bebés y niños pequeños. Se pueden realizar con diferentes materiales, y abordar con ellas temáticas que nos interesen, como haremos en este caso, una bolsa sensorial de San Valentín.
Las bolsas sensoriales son perfectas para estimular a los bebés a partir de 6 meses y hasta los 3 años.
Materiales necesarios
- Bolsas zip para alimentos
- rotulador permanente
- Gel para cabello, o jabón líquido, lo importante es que sea transparente
- colorantes alimentarios, acuarelas líquidas o pintura de dedos
- purpurina
- pequeños objetos, como abalorios, lentejuelas, ojos móviles ,etc.
Paso a paso
- Vamos a preparar nuestras bolsas. Los peques más mayores pueden ayudarnos. Primero dibujaremos un gran corazón sobre la bolsa.
- Luego vamos a echar una buena cantidad de gel dentro de la bolsa. No debemos llenarla demasiado, porque al cerrarla los peques deben poder mover el gel con los dedos.
- A continuación echamos unas gotas de colorante, acuarelas o lo que tengamos para dar color.
- También agregamos pequeños objetos y purpurina
- Cerramos muy bien la bolsa (podemos reforzar el cierre con celo de embalar para que no se filtre nada)
- Ahora los peques pueden comenzar a experimentar. Según la edad, pondremos la bolsa sobre la mesa, o en el suelo. Vamos a incentivarles para que toquen, presionen, rayen con el dedo, etc. A los más grandes vamos a pedirles que muevan el gel y los pequeños objetos hacia dentro del corazón.
Quién puede hacer esta actividad
- Bebés a partir de 6 meses: recién están empezando a mantenerse sentados, o tal vez aún no lo hagan. Podéis poner la bolsa en el suelo y acostar al bebé boca abajo, de manera que pueda tocarla con sus manos, estimulando los músculos del cuello para mantener la cabeza erguida.
- Bebés a partir de 9 meses: ya se sientan sin problemas, gatean o se mueven a su manera. Es el momento para hacer esta actividad sentados, con la bolsa en el suelo, y dejarles experimentar con las manos e incluso los pies.
- Bebés a partir de 18 meses: a esta edad, además de estimular los sentidos, podemos incorporar el juego de «rellenar» el corazón dibujado sobre la bolsa, moviendo con las manitos y los dedos todo el contenido de la bolsa hacia dentro de los márgenes del corazón. También pueden usar un palito para presionar el gel y moverlo.
Para que sirve esta actividad
Como todas las bolsas sensoriales, con esta actividad se estimulan principalmente los sentidos del tacto y la vista. También se estimula la motricidad fina, cuando los bebés intentan mover los objetos pequeños.
Consejos prácticos
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- Los niños deben estar siempre bajo la supervisión de un adulto
- Podéis adaptar la actividad a otras temáticas, usando otros colores y dibujos diferentes sobre la bolsa.
- Si pegáis la bolsa en una puerta ventana, la luz del sol atravesará la gelatina creando efectos de transparencia que estimulan aún más el sentido de la vista.